Blanqueamiento Dental

En el caso de que los dientes tengan un aspecto indeseable como consecuencia de la decoloración por amarilleamiento u oscurecimiento por diversos motivos de la vida cotidiana, surge la aplicación del blanqueamiento dental. Dentro del blanqueamiento dental se aceptan las aplicaciones que se realizan para conseguir un aspecto estético y saludable de los dientes y que acercan el color de los mismos al blanco. Para ello, existen técnicas que pueden aplicarse profesionalmente en las clínicas dentales, así como métodos que pueden aplicarse en casa, como las pastas dentales blanqueadoras y diversos productos químicos disponibles en los mercados. Dado que el método de aplicación, la eficacia y los efectos sobre la salud dental de cada método son diferentes, el método recomendado para cada paciente puede variar.

¿Por qué se vuelven amarillos los dientes?

Los dientes tienden a perder su color natural de dos maneras. Estos procesos se pueden resumir de la siguiente manera:

Decoloración externa: El amarillamiento u oscurecimiento del color de los dientes puede verse con el tiempo debido a las sustancias químicas que afectan a la superficie del diente desde el exterior, como el café, el té, los tintes alimentarios, el tabaco. Por lo tanto, las técnicas dirigidas a la superficie del diente son más eficaces para los dientes con decoloración externa.

Decoloración intrínseca: Son cambios de color debidos a problemas de salud que causan daños o pérdida de función en los tejidos del interior del diente. Suelen observarse en la infancia, que abarca el periodo de crecimiento y desarrollo del diente, con enfermedades febriles, consumo de drogas, traumatismos en el diente, infecciones, caries o envejecimiento. Este tipo de decoloración requiere técnicas profesionales.

¿Cuáles son las opciones en el blanqueamiento dental?

A la hora de blanquear los dientes, es muy útil que los pacientes consulten con su dentista para determinar el método más idóneo y eficaz para sus dientes. Quienes deseen blanquear sus dientes pueden elegir entre una amplia gama de opciones de blanqueamiento dental, desde métodos sencillos que pueden aplicarse en casa hasta técnicas profesionales aplicadas por un dentista.

Para determinar qué técnicas se aplicarán a quién; son importantes el tipo, la gravedad y la prevalencia de la decoloración de los dientes, el coste del tratamiento y la edad del paciente, las enfermedades subyacentes, los tratamientos anteriores aplicados a los dientes, como las situaciones que afectan a la aplicabilidad al paciente. Hay que tener en cuenta que el proceso de blanqueamiento dental puede durar mucho tiempo para algunas personas y que la blancura deseada se puede conseguir gradualmente con la aplicación coordinada de más de una técnica. Es muy importante utilizar técnicas profesionales, especialmente en pacientes con encías retraídas, deterioro de la estructura dental o daños en las estructuras orales.

Técnicas profesionales de blanqueamiento dental

Blanqueamiento: En este procedimiento realizado por el dentista se utiliza peróxido de carbamida o peróxido de hidrógeno. Gracias a este proceso se consigue el blanqueamiento en dientes que han sufrido una decoloración por motivos intrínsecos. Se pueden obtener resultados muy rápidos y efectivos en condiciones clínicas.

Aplicación de bandejas: Los dientes se pueden blanquear en casa con la aplicación de aparatos dentales recubiertos con un gel que contiene las sustancias utilizadas en el blanqueamiento dental y que se preparan individualmente llevándolos durante 30 minutos a 1 hora.

Técnicas de blanqueamiento dental que se pueden aplicar en casa

Pastas blanqueadoras de dientes: Especialmente contra la decoloración de origen externo, el uso de pastas que contienen partículas abrasivas sobre la superficie del diente puede dar resultados rápidos y eficaces. Sin embargo, en el uso a largo plazo, pueden aparecer diferentes problemas dentales debido al desgaste del esmalte dental.

Tiras blanqueadoras: Son tiras que pueden blanquear los dientes aplicándolas sobre la superficie del diente una o dos veces al día durante un periodo de tiempo determinado. Estas tiras contienen una baja concentración de peróxido de hidrógeno y funcionan de forma similar a las técnicas profesionales.

¿Cuáles son los efectos secundarios del blanqueamiento dental?

Dependiendo de la técnica utilizada en el blanqueamiento dental, se pueden producir diferentes niveles de daño en la estructura dental y, como consecuencia, diversos problemas de salud dental. Algunas de las complicaciones que pueden observarse en los pacientes durante el tratamiento de blanqueamiento dental son las siguientes:

Sensibilidad dental: Especialmente después de la primera o segunda sesión del tratamiento de blanqueamiento dental, se puede sentir una sensibilidad dental generalizada. El paciente puede experimentar dificultad para consumir alimentos fríos o calientes, alimentarse o respirar por la boca. En las fases posteriores del tratamiento, la sensibilidad dental pierde su gravedad.

Sensibilidad en las encías: Como resultado del intenso contacto de los productos de blanqueamiento con las encías, puede desarrollarse sensibilidad debido a la irritación de las mismas.

Incompatibilidad con otros tratamientos dentales: Los tonos blancos de las prótesis dentales, los implantes o los empastes utilizados por los pacientes por diferentes motivos pueden no ser los mismos que el tono obtenido como resultado del blanqueamiento. En este sentido, puede ser necesario aplicar más de una sesión o cambiar los tratamientos relacionados con el dentista, con el objetivo de proporcionar un blanqueamiento uniforme y estético.

El aspecto blanco obtenido como resultado de los procedimientos de blanqueamiento dental no es permanente. Para mantener el color obtenido con el blanqueamiento dental, es necesario repetir tanto los procedimientos aplicados en casa como las aplicaciones realizadas por el dentista a intervalos regulares. Además de repetir los procedimientos, también se recomienda prestar atención al estilo de vida y evitar el consumo de productos como el té, el café y los cigarrillos que pueden causar decoloración.